Los actuales agricultores dedicados al cultivo del Loche en la región Lambayeque aún mantienen las tradiciones y prácticas culturales heredado de sus ancestros, desde las culturas Moche, conocida también como Mochica (100 -750 d.C); Chimú (700 – 1470 d.C) y Sicán o Lambayeque (700 -1300 d.C), de ésta última se puede apreciar evidencias de dichas manifestaciones culturales halladas en la zona arqueológica del Santuario Histórico del Bosque de Pómac, plasmadas en cerámicas el fruto del loche, así como restos botánicos (semillas) encontrados en tumbas y excavaciones, que se exhiben en el Museo Nacional de Sicán en la ciudad de Ferreñafe.
Por: Milagros Núñez. Periodista – Promotora Turística

El loche tiene una fuerte coloración en su interior – que varía de los amarillos intensos hasta tonos casi naranjas, debido a su alta concentración de xantofilas y carotenos importantes antioxidantes. Destaca por ser diurético, antiinflamatorio, protege a la mucosa estomacal; es decir; ejerce acción antiparasitaria, en especial tenicida, por sus componentes cucurbitina, albúminas, lecitina, resinas, titosterina, contiene vitamina A, B, B2, B5, C y minerales. Se recomienda su consumo a las personas que padecen diabetes tipo 2 y además el consumo frecuente de loche ayuda a prevenir diversos tipos de cáncer. En el Perú, el cultivo del loche se ha focalizado en las tres provincias de la región Lambayeque: Chiclayo, Lambayeque y Ferreñafe, siendo la principal zona de producción y de mejor calidad la que se cultiva en el caserío Pómac III ubicado en la zona de amortiguamiento del Santuario Histórico Bosque de Pómac colindante al distrito de Pacora.
El loche encierra un sinfín de historias en familias y agricultores que por años se han dedicado al cultivo y cuidado del mismo, logrando su posicionamiento en toda la región Lambayeque y desde algunos años ya en el Perú.
Llegué por tercera vez al caserío Pómac III en busca del rico loche y su historia, encontrándome con don Juan García Coronado neto agricultor lambayecano de 57 años de edad, quién me contó con mucha amabilidad su historia, con quien pude caminar por sus inmensas tierras de cultivo del loche conociendo en toda su magnitud la importancia de esta bendita planta, denominada científicamente como Cucurbita Moschata Duchesne.
Juan García nacido en el distrito de Íllimo, hijo del illimano don Casiano García Yauce; y de doña Beatriz Coronado Morillo pacorana, nos cuenta que conoció el cultivo del loche desde los 10 años de edad, junto a su padre, en el distrito de Illimo. Recuerda que siendo niño le alcanzaba los esquejes (semilla) para que vaya sembrándola; y fue allí en donde aprendió a cultivar y amar este hermoso fruto que pertenece a las plantas de tallo rastrero o trepador. Sonriente don Juan comenta, que a su abuelo, padre y tíos los conocían en Íllimo como los chepos, siendo los primeros locheros del distrito dedicados al 100% en su cultivo. Pasó el tiempo y cuenta don Juan que a los 19 años de edad llegó al caserío Pómac III para sembrar loche y fue allí donde conoció al amor de su vida, doña Marleny Benítez Asalde con quién tuvo 4 hijos; Miguel, Ronald, Fidel y Juan a quienes inculcó tal cual como lo hicieron con él, el cuidado y cultivo del loche. Como guiado por Dios, don José llegó a una familia de reconocidos locheros en esta zona, los Benítez, calzando muy bien en dicha familia. “El loche, es una verdura muy agradable, muy aromática, indispensable para el cabrito, arroz con pato, el jugosito de chancho; y también el loche sancochado acompañado con su ceviche de caballa, es muy agradable y es uno de nuestros platos tradicionales aquí en Pómac III”, señala muy alegre don Juan.

PROCESO DE SIEMBRA, COSECHA Y VENTA
El loche se puede sembrar dos veces al año, primero en enero y se cosecha en mayo, luego se siembra en julio y se cosecha entre noviembre a diciembre. Cuando hay mucho calor la planta crece poco, el loche requiere de más frío que calor; es decir de un clima temperado. La venta del mismo se hace por mallas según el loche, cuando es grande caben 80 loches por cada malla, y cuando es más pequeño caben 120, 170 hasta 200 por malla, llegando a pesar entre 120 a 140 kg cada malla. Cuando hay producción su costo es de S/500.00 a S/600.00 soles por malla, en cambio cuando es temporada baja los meses de enero y febrero el loche eleva su precio llegando a costar hasta S/1000 soles la malla, debido a la poca cosecha. El requisito básico para que continúe la forma y calidad de los frutos del loche, es que se mantenga la propagación vegetativa por esquejes o vetas – tallito que se introduce en el terreno necesitando muy poca agua para su riego.
Para saber identificar el legítimo loche éste debe pesar hasta 2.50 kg, y debe tener una textura gruesa abultada, el color entre cenizo y verde, un poco alargado, medios curvilíneos, y con un buen aroma. Las tierras de Pítipo, Batan Grande y Pómac III son las mejores y junto al abono orgánico del algarrobo y del vichayo generan el buen sabor y el aroma al mismo.
Cabe precisar que este producto agrícola se cultiva en la región Lambayeque de manera ancestral y tiene un gran valor para la gastronomía norteña. Se trata de un fruto con color, textura y sabor característicos, que son otorgados por el suelo, agua y clima de la zona, así como por las técnicas de producción que emplean los agricultores. Sobre la siembra; primero se ara la tierra, luego se afloja con máquina surcadora y forman los canales, continúan armando pequeños agujeros en el terreno siguiendo una línea recta. Se suele usar una azada o un plantador para hacer los agujeros, en ellos se introducen las semillas conocidas como esquejes, que se obtienen de las mismas plantas rastreras, se cortan los tallos, se unen y se vuelven a sembrar en los canales que el agricultor forma, y se deja la planta hasta que tenga 8 días y llegue a pegar, luego en tres meses va brotando su fruto, y a los cuatro meses ya está listo para la cosecha y venta.
CREENCIAS Y LEYENDAS
Conversando con don Juan García, nos confirma la creencia de que cuando la mujer está embarazada y se pasea por toda la tierra cultivada de loche durante la fase de luna creciente es de muy buen augurio. Así mismo, que cuando la mujer esté con su período menstrual, ésta no puede pisar la chacra del loche y menos en la etapa de afloración porque traería abajo todo el cultivo. Ya cuando el loche está para cosechar, es decir; en la fase final, recién allí la mujer puede ingresar a los campos de cultivo a la cosecha tradicional, narra con total claridad el lochero Juan García.
Según algunas investigaciones señalan que el significado de la palabra Loche vendría a ser algo como “Lágrima de la luna”. Estas características especiales hacen de este producto un ingrediente infaltable para la gastronomía peruana, especialmente la norteña, en platillos como el arroz con pato, espesado chiclayano, cabrito a la norteña, arroz con pollo entre otros.

Mi pasión siempre ha sido el cultivo del loche, que me ha permitido solventar la educación de mis hijos, vivir en paz con un trabajo fuerte y digno.
LOCHE DE LAMBAYEQUE ES ELEGIDO “PRODUCTO EMBLEMÁTICO” POR LOS PREMIOS SUMMUM 2023
Una enorme alegría vivió don Juan García junto a su familia tras recibir el reconocimiento por su producto agrícola el Loche como “Producto emblemático” por los premios Summum 2023 en la ciudad de Lima. Este fruto con un agradable aroma y sabor característico, ha sido reconocido como, uno de los galardones más importantes de la gastronomía peruana que se otorga anualmente a productos representativos del país, a los mejores chefs y restaurantes, entre otras categorías desde su creación en el año 2007, que incluyen también productos emblemáticos y reconocimientos a productores agrícolas. La ceremonia de premiación se celebra en Lima y reúne a los principales actores de la industria gastronómica. Como Lambayecanos debemos sentirnos orgullosos que en representación del caserío Pómac III, don Juan García Coronado haya sido premiado en aquella oportunidad por su excelente dedicación por años al cultivo y cuidado del loche. Los premios se basan en datos de una encuesta realizada por Ipsos a selectos especialistas gastronómicos y comensales, que califican a los restaurantes según el nivel de sus recetas, ambiente y atención.
EMPRENDIENDO CON EL LOCHE
En la actualidad, la familia García Benítez ha incursionado en el turismo vivencial, brindándole al visitante un recorrido por las hectáreas del cultivo del loche, participando de la siembra, cosecha y recolección del mismo. También podrán degustar de un rico almuerzo con platos típicos de la zona preparados con el insumo bandera, el Loche de Pómac. Y por la tarde, el turista podrá disfrutar de la casa de campo, juegos, visita a los talleres artesanales de algodón nativo y además podrán pernoctar en su Casa Vivencial el “Loche de oro” la gran dinastía Sican, la mismas que te ofrece una acodera vivienda rústica familiar, nada que envidiar de la ciudad. Lo mejor de todo, es que regresaras a tu destino renovado y cargado de loches para la preparación de tus alimentos, considerando que son muy nutritivos para la salud. Esta casa vivencial está ubicada en el caserío Pomac III, ingresando por la carretera Matriz, la misma que conecta con la carretera que nos dirige al distrito de Pacora.
Como buena Lambayecana, solo me cabe recordarles la siguiente frase” Primero lo nuestro, después el resto”.
Cabe recordar, que el 3 de diciembre del 2010, INDECOPI declaró el zapallo loche como producto emblemático de Lambayeque, otorgándole la denominación de origen. Convirtiéndolo en la sexta denominación otorgada por el Estado, como un producto originario de esta tierra norteña, en mérito a sus peculiares características debido al medio geográfico donde se produce, incluyendo los factores naturales y humanos.


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